Resumen

La producción de hierro en grandes cantidades y la reducción de su coste, que lo hacía asequible como material de construcción, supuso en el siglo XIX uno de los avances técnicos que tuvieron mayor importancia en el desarrollo de la Revolución Industrial, dando lugar a nuevos procedimientos, entre ellos la construcción metálica. Los puentes metálicos aparecieron a finales del siglo XVIII y tuvieron un desarrollo espectacular en el XIX, hasta llegar a conocerse como "el período de los puentes metálicos". En la actualidad conservan plena vigencia, aunque el hormigón lo ha desplazado como material predominante para la construcción de puentes de luces pequeñas y medias.