Resumen

La demanda creciente de cruceros de gran tamaño en el Puerto de Ibiza originó la necesidad de incrementar la longitud de los muelles transversales al abrigo del dique Botafoc, porque la existente resultaba insuficiente para buques de esloras comprendidas entre 220 y 340 m. Éstos únicamente pueden atracar en el Muelle Adosado al Dique de Botafoc generando interferencias con los petroleros, que también atracan en dicho muelle.


Para dar respuesta a esta situación se prolonga el Muelle Transversal 2 añadiendo 3 duques de alba pilotados, completando, de este modo, una longitud total de atraque de 375 m en el lado sur y 328 m en el lado norte para dar servicio a buques Ro/Ro y cruceros de gran eslora.


La mayor singularidad de estos muelles es la gran “vela” que tienen los buques que atracan en ellos, por lo que la acción del viento es enorme. Esta acción debe ser soportada por el muelle, con unas líneas de amarre que tienen la complejidad de partir de puntos muy altos en los barcos. Frente a esta problemática, se pueden plantear diversas opciones, que serán descritas en este artículo. Además, se mostrarán algunos accidentes acaecidos en algunos muelles de cruceros por esta causa. En este artículo se describirán las obras proyectadas, insistiendo en los detalles de los duques de alba y reflexionando sobre el estado del arte en este tema y, en particular, sobre los sistemas para resistir las enormes fuerzas horizontales generadas.