Los túneles en España
Resumen
Comienzo de la Mecánica de Rocas en España La Sociedad Española de Mecánica de Rocas aceptó un libro de Talobre en 1957 (La Mecanique des Roches) como comienzo de su primera idea básica de Mecánica de Rocas, que luego se aplicó en algunas presas construidas antes de 1964. Varias grandes presas bóveda (La Barca, Canelles, El Atazar) y de gravedad (Mequinenza) requirieron refuerzos importantes de la cimentación. Las primeras realizaciones se presentaron en el primer Congreso Internacional de Mecánica de Rocas (Lisboa, 1966) y se continuaron en muchas otras presas construidas hasta 1970 y estudiadas en el Centro de Estudios Hidrográficos. Después la Sociedad Española de Mecánica de Rocas se desarrolló con los planteamientos de ingeniería geotécnica de José Antonio Jimenez Salas y de Santiago Uriel. “Prehistoria” de los túneles en España La “mina” de Daroca se construyó en el siglo XVI para encauzar una rambla que cruzaba (e inundaba) una parte central de la ciudad. El túnel de ferroviario de Tablada de 2380 m de longitud (el el tramo Villalba-Segovia) se construyó en 1884-88. Hasta las últimas décadas del siglo XX la excavación se realizaba por métodos clásicos (belga, alemán): ataques parciales de 10 a 15 m2 de sección con sucesivos ensanches posteriores. Se entibaba con piezas de madera. Predominaban os métodos empíricos El primer túnel “moderno” fue el túnel de peaje de Guadarrama (1960-1963) excavado a sección partida, pero sin cálculo estructural ni instrumentación del macizo rocoso. Se construyeron, con excavaciones parciales sucesivas, cavernas de gran sección para alojar centrales hidroeléctricas. La clasificación de Lauffer (1958) se citaba en la literatura técnica y se explicaba en la docencia de la geotecnia, y en la literatura geotécnica, pero se aplicaba poco en la práctica constructiva. En el primer gran transvase hidráulico (acueducto Tajo-Segura) se empleó por primera vez una tuneladora integral (“topo”) Pero sufrió un colapso al comienzo de su excavación. Los túneles en España después de la creación de la Sociedad Española de Mecánica de Rocas (SEMR) Inicialmente la SEMR se concentró en los aspectos básicos de la Mecánica de Rocas: fracturación, resistencia mecánica, tensiones y deformaciones de las cimentaciones, aspectos hidráulicos del macizo. En su primer Simposio se estudian estos aspectos y su aplicación a presas y aprovechamientos hidráulicos. La construcción de la primera red de autopistas de peaje significó la introducción práctica en España de los métodos de mecánica de rocas en la construcción de taludes y túneles. En 1970 se publicó la traducción al francés del libro “Traité de construction des tunnels” de K. Szechy. Y en 1973 la traducción inglesa: “The art of tunelling”. Ambos textos se hicieron populares en la práctica española que continuó en la práctica siendo empírica. La Revista de Obras Públicas informó detalladamente sobre los hitos mundiales en la construcción de túneles. Julián Garcia Rosselló envió al Congreso de Grandes Presas de 1973 un artículo sobre las obras subterráneas del aprovechamiento Camba- Couso. En él analiza ambos enfoques, teóricos y prácticos, de la construcción de túneles. En la época había gran diferencia entre los mundos académico y práctico de diseño y construcción de obras subterráneas. Pero en la década 1970-80 la construcción de autopistas de peaje supuso la incorporación a la práctica española de los métodos modernos de diseño y control de construcción de túneles. En 1974 se fundó la Asociación Española de los Túneles, AETOS, con el apoyo de las Sociedades Españolas de Mecánica del Suelo (SEMSIG) y de Mecánica de Rocas (SEMR). Las tres organizaron conjuntamente ese año el I Simposio Nacional de Túneles.